sábado, 25 de diciembre de 2010

CABLE: FELIZ NAVIDAD

lunes, 13 de diciembre de 2010

LA BOUILLABAISE ETNICA SE REFORMA........... Y SE RE-INVENTA


El Mediterráneo sigue azul, el calor un dulce recuerdo, el Mistral se enoja cada tanto para recordar que no es huésped de paso y Marsella arranca todos los días con ese mismo aire cansino de siempre, nunca demasiado temprano para mantener las distancias con todas las culturas bárbaras que vienen del norte y que calientan los motores antes del primer rayo de sol pues éste se come las horas y el hombre no se puede permitir  despreciarlas.

Marsella va tranquila, desparramando su gente por los barrios, mezclando nacionalidades y origenes de todo tipo, por necesidades recientes y por costumbre de sus muchos siglos de ciudad marítima.

El vieux-port es sitio de gentiles encuentros además de plaza de mercado del pescado, donde el turismo de paso de los cruceros se empecina a sacar fotos de la mercadería en primer plano como si fueran exóticos y raros ejemplares.

El gran salón cambia según las circunstancias y a veces el vestuario de los transeúntes define el evento: qué mejor atuendo para presentar batalla el de ir cada parte con su respectiva moda. Los ciudadanos de a pié nos conformamos con la fashion-look del momento o la que apetezca mientras que la policía va adquiriendo unas extrañas vestimentas al estilo Robocop.

Para alterar la paz se ha incorporado al hogar Lipsia, gata“routière”y“gouttiére”, traducción del italiano de Leipzig. Como bien observó el veterinario con media ceja levantada: llamarla Waterloo es demasiado largo. La provocación me está costando cara porque la batalla perdida la llevo yo visto que la gata salió funámbula, adicta en salto de altura y longitud, ladrona, saboteadora de papeles, ocultista y ocultadora, y cracker potencial pues pasea sobre los teclados sin ningún reparo.

miércoles, 28 de abril de 2010

ALLEZ OM


No habían pasado ni 15 minutos  que el OM se adelantó en el marcador al mismo tiempo que yo salía despedida por un empujón entusiasta del sitio donde estaba parada. Lo imprevisto nos coge con los músculos relajados y la torcedura de tobillo estuvo asegurada aunque menos grave del susto inicial. Hielo y reposo hacen milagros, pero en el momento los nervios y el dolor me pusieron en fuga veloz a lamerme las heridas al extremo de la curva de los ultra, tierra desierta porque la visión del campo queda terriblemente reducida.


Hay partidos que aunque le unten con mantequilla los tapones de las zapatillas de los jugadores, no pasan de grandes resbalones; desconsuelo para la afición multitudinaria y heterogénea, fiel reflejo de la ciudad.

Desde mi ángulo pobre,  pero seguro, me dediqué a mirar el entorno, aunque tuve por un momento casi al alcance de mis manos unos jugadores de ambos equipos que a empujones intentaron arrebatarse la camiseta y con ganas de algo más.
Enfrente el corredor de calentamiento y a la izquierda las gradas “chic”.


Fotos y TV amplifican tanto la realidad que en vivo los jugadores parecen correr en ralentí, los blancos salen enanos al lado de los colosos morenos; todos muy descamisados como si esto de andar medio a lo cutre certificara el ganarse el pan.
Los ultra comen bocadillo de marguez con frites, sinónimo local de la hamburguesa Mc y van y vienen con el uniforme reglamentario doble: el de quita y pon con los colores del club y el de tinte permanente de tatuajes sorprendentes.
No se que virus circula , pero lleva a muchos a un ritual exhaustivo de cervezas. Un hombre joven acertó en el murete donde estaba sentada; demasiado cerca , demasiada fija la mirada. Cuando habló, las palabras salieron tan masticadas cuan ininteligibles. Algo interior avisa precaución, los vapores del alcohol alteran la personalidad;  pero este hombre me miraba extraviado. Me tocó el pelo, cogiendo un mechón y abriéndolo en el aire como algo irreal y luego con gran esfuerzo se excusó, pensé en un amago de vergüenza y de retomar dignidad.



Salí del estadio impregnada  del olor de la hierba, en total calma junto a los supporters tranquilos, con el partido ganado y la satisfacción del día cumplido y la faena hecha.

Nos han vendido el sueño del fin de semana bien aprovechado con un siniestro regusto de clonaje masivo

sábado, 17 de abril de 2010

¿VIAJERO O TURISTA?


Spiderman se ha convertido en viajero, como lo definía el escritor Paul Bowles: “ alguien que no pertenece más a un lugar que al siguiente....y que compara su civilización con otras rechazando lo que no le gusta mientras que el turista la acepta sin cuestionarla”.

Cansado o más bien hastiado de un papel que ya no le cuadra porque hay estadísticas que afirman que los crímenes se cometen mayormente en familia con una cadencia de un homicidio cada dos días. Parece que se ha aflojado la autoridad y se llega a la madurez con la frustración a cuestas y poca contención de las pasiones más elementares y así caen padres, hijos, esposas, maridos y parientes en asesinatos que no entran en el enfoque de los “enemigos públicos”, no persiguen el control del poder.


Spiderman, a corto de criminales con “currículum" , se pasea por New York desorientado, abrazando niños para la foto del álbum familiar o en versión fine art del superhéroe que ha perdido la escena, pero se le ha quedado encolado el traje para actuar.

Medita en otros parajes del mundo como sujetar la mano de esos que hoy son niños para que mañana,  adultos, no destripen algún pariente.

No hay suficientes superhéroes para esta criminalidad.

lunes, 12 de abril de 2010

NACER IGUAL, VOLVERSE DIFERENTE


Muchas veces escuché la palabra, mas no presté la atención debida. No resaltó en negrita ni se subrayó respecto al resto del discurso; pero en los últimos tiempos tomó poder por sí sola al aparecer al principio del discurso, así fue que al oírla, un silbido empezó a sonar en mi cerebro.

-Yo soy “diferente”- hasta con matices del tipo:- desde pequeño/a, siempre supe que yo era diferente.-

Las primeras veces que recalqué sobre la palabra, instintivamente busqué sobre mi interlocutor/a algún signo físico evidente, una marca resplandeciente y positiva por el tono orgulloso; pero no aprecié ninguna diferencia con los comunes mortales, por lo menos a mis ojos. No es la historia de pertenecer al grupo de los selectos  tipo: muchísimo más ricos  que la mayoría que trabaja para salir adelante ni de la tribu del Iphone ni hablar 8 idiomas ni haber visitado lugares insólitos del planeta ni poseer cualquiera de esas cosas que marcan un momento y que otorgan distinción aunque no se sepa muy claro si van acompañadas por aumento de materia gris. Esto es otra cosa, no es algo material , es una fuerza intangible, la pertenencia a una selección divina, un especie de outsider de no se donde. Algo tan sentido por el personaje que realmente está convencido de ser único o casi. Tampoco es una cuestión de genio como Leonardo mas bien un superpoder para ver su diferencia con los demás, el ojo de Superman para ver más claro y rápido en todo. Luego estos nuevos diferentes, en general no se distinguen en nada particular que les haga ganar premios de ninguna índole, pero eso es otro detalle.

domingo, 21 de febrero de 2010

LOS PERROS PIJOS


Un hombre, sentado frente al mar con la mirada hacia el horizonte azul, acaricia a su perro. El perro supera la talla mediana y en comparación con el hombre parece más joven, aún con el vigor del animal maduro pero no viejo.
Una estampa clásica que se puede repetir en cualquier lugar. La escena nos despertará unos sentimientos conocidos que pasaran fugazmente por la mente: amistad, compañerismo, fidelidad, ternura y etc. Pero si el perro de tamaño no tan pequeño yace en los brazos de su amo, mas que suplantar a un niño yo lo vi como a un enorme hot dog al que en cualquier momento su dueño iba a dar un bocado.


¿No estaremos exagerando en nuestra relación con nuestros mejores amigos haciéndoles cruzar una línea tras la cual el animal ya no sabe lo que es? ¿Y si mañana los perros se rebelan y vuelven a ser perros retomando su dignidad de animal, no de sustituto de algo imposible porque perteneciente a la raza humana con la cual no tienen ningún parentesco?
Siempre han sido una buena asociación y al elevarlos a rango de pijos o de extremadamente mimados, los reventamos de aburrimiento, a un papel que no les pertenece.



El perro aún pijo, “noblesse oblige”, no pierde dignidad y mantiene un increíble gesto de sabiduría ante nuestro espectáculo.
¿Quién se está riendo de quién?

miércoles, 17 de febrero de 2010

EL GANCHO DEL 3D


Tengo miedo de mirarme al espejo y verme convertida en una Barbie de colores de cacatúa. No he llegado aún al estadio de terror a quedarme atrapada en él, un poco al estilo del corto “Alma” de Rodrigo Blaas , pero me acerco con desconfianza a observarme.

La red está invadida  de publicidad de muñequitos al 3D. La digitalización va viento en popa y ya los portraits me parecen pertenecientes a la misma tribu. Cierto que ya mucha gente tiene la boca A, B o C, lo mismo la nariz y con unos retocones de Photoshop la piel aparece lisa y tersa como culito de bebé; pero en los póster de publicidad de la calle , donde antes me sonreía una star con el perfume de turno, ahora muñequitos coloridos me miran todos con ojos y morros igual de desabridos.
Si me meto con un video, para llegar a la captación de las emociones humanas en 3D, a lo Avatar, estamos todavía que hay que atracar el FMI para el presupuesto. Pero la tecnología avanza rápidamente y todavía me acuerdo hace unos años cuando los móviles empezaban a popularizarse que un conocido ladró con que habíamos llegado a lo máximo; el muy papanatas debe andar viviendo colgado de un árbol y comiendo plátanos.


Dicen muchos que football y cinema tienen mucho en común pues en ambos actúan nuestros ídolos y sobre ambos la prensa nos cuenta y muestra vida, obras y milagros.
“El football es el comecocos del fin de semana para que la gente no piense”; este era el lema favorito de lunes a viernes de un compañero de hace dos mil años que se profesaba intelectual y que luego rigurosamente desaparecía el domingo cuando su equipo jugaba en casa o se atrincheraba en un bar. Si fuera una artimaña de los gobiernos para mantener la cabeza  de la gente ocupada, entonces llevamos ya un tiempo largo que hemos dejado de pensar no sólo el fin de semana.

No acabamos de ver Avatar y ya hay promesas y juramentos para la versión 2 y nuevos directores para lanzarse a películas en 3D; me pregunto si en un futuro el hincha vestirá la camiseta del equipo para ir al cine a ver sus ídolos jugar en tridimensional y el futbolín no sería en su época, el preanuncio rudimental de los muñequitos 3D computer graphics.

Como siempre, está en nosotros en no llegar a la sociedad planificada, ordenada y perfecta, con aire de sardina en lata por todos iguales.

domingo, 24 de enero de 2010

EN LA ERA DE AVATAR


Sigo aferrada al cine de los años 40, 50 y 60 donde había película porque también había guión. Los actores se cubrían con el Pan-cake Make-up  de la Max Factor y tardaban horas para conseguir una cara diferente y enfrentar la cámara. Ahora vamos encaminados hacia unos alienígenas azules, a despecho de los marcianitos que siempre fueron verdes, y los nuevos actores se pasan horas de programa en programa de ordenador. Voces gritan que terminaremos todos con anteojitos o algún otro artilugio porque por ahí se mueve la imagen en el futuro.


Mientras, los actores de la vida real siguen rebuscando en su propia imaginación, entrelazando con lo que se ve alrededor y metiendo mano a lo que se tiene a mano para lograr el objetivo.
A falta de maquillaje, buena es la máscara para el personaje de malo y un mecanismo inventado para la captura del bandido que luce color futurista estilo Avatar.


El mejor sitio para los anuncios sigue siendo la calle y todo pizarra es buena  cuando el presupuesto no da para agencia .
Y si parte del decorado necesita aireado, el techo de un taxi es una excelente ocasión para que no se ensucie y además para mantener el fresco en el interior del vehículo.

En las artes visuales no importan los recursos de los artistas ni las estrategias a seguir; es igual en cualquier parte del mundo, lo importante es investigar, crear y divertirse.